Sabiduría Diaria 31.07.2017
![](https://static.wixstatic.com/media/5ad566_3a0903439e924592bbaf29a7aaf2b8b4~mv2.jpg/v1/fill/w_135,h_101,al_c,q_80,usm_0.66_1.00_0.01,blur_2,enc_auto/5ad566_3a0903439e924592bbaf29a7aaf2b8b4~mv2.jpg)
(FOTO: LAURENCE FREEMAN, CANADA) El trabajo del silencio es escuchar. Al escuchar el silencio somos atraídos hacia el amor por él, nos parece amistoso, no temible, y nosotros mismos comenzamos a silenciarnos. Reflexionando teológicamente sobre esta experiencia, podemos decir que es parte del proceso humano de divinización, de llegar a ser «semejantes a Él, porque lo veremos (y oiremos) como Él realmente es». (A Letter from Laurence Freeman, 2017/02)